“Recuerde que con Higiene y Cocción adecuada de los alimentos el SUH se puede prevenir”
¿Qué es? el SUH se trata de una enfermedad transmitida por alimentos contaminados con un tipo específico de la bacteria Escherichia coli que se encuentra frecuentemente en el intestino del ganado bovino y otros de granja.
¿Cómo se contrae? La principal forma de contagio es mediante el consumo de carne picada insuficientemente cocida, leche no pasteurizada, frutas y verduras lavadas con aguas contaminadas u otros alimentos contaminados. También se puede contagiar de persona a persona por la falta de higiene en las manos.
¿A quienes afecta? Principalmente a niños y ancianos, aunque los adultos también pueden padecerla, especialmente aquellos que tengan su sistema inmunológico deprimido.
¿Cuáles son los síntomas? Esta enfermedad se manifiesta con una diarrea, a veces con sangre, fiebre y/o vómitos, decaimiento y deshidratación, luego evoluciona hacia la colitis hemorrágica con una duración de 4 a 6 días, el paciente rápidamente se torna pálido y anémico. Puede presentar complicaciones evolucionando hacia el SUH presentando fallas en la función de los riñones. La enfermedad puede ser muy grave.
Mientras estos síntomas persistan evite manipular y/o preparar alimentos y acuda al centro de salud más cercano
Otros datos:
En la Provincia de Río Negro, al igual que en toda la República Argentina, el síndrome urémico hemolítico (SUH) es una enfermedad endemoepidémica que afecta principalmente a niños menores de 5 años. Es la primera causa de insuficiencia renal aguda (IRA), hipertensión arterial (HTA) y la segunda de insuficiencia renal crónica en niños. Generalmente la disfunción renal se prolonga varios años con serias limitaciones en la dieta de la persona afectada.
El 20% de los niños y adolescentes que reciben trasplante renal en Argentina, ha padecido SUH.
En nuestro país se notifican más de 500 casos nuevos por año.
El agente etiológico principalmente involucrado es Escherichia coli productor de toxina Shiga (STEC), fundamentalmente del serotipo O157:H7, el cual se encuentra en el intestino de animales bovinos sanos, y de otros animales de granja, y llegan a la superficie de la carne por contaminación con materia fecal durante el proceso de faena o su posterior manipulación. En Argentina, la prevalencia de STEC en el ganado bovino supera al 40% de los animales.
¿Cómo prevenirla?: ésta enfermedad al igual que la mayoría de las enfermedades de transmisión alimentaria se puede prevenir:
Utilizar agua potable para beber, higienizarse y preparar alimentos (si no cuenta con agua de red potabilizarla con 1 gota de lavandina por litro de agua y dejar reposar durante 30 minutos).
Cocinar muy bien todo tipo de carnes (en especial la carne picada), hasta la desaparición total de jugos y color rosado.
Lavarse correctamente manos luego de manipular carne cruda, después de ir al baño, tocar animales y antes de comer. En caso de que un adulto presente síntomas gastrointestinales, extremar esta medida y en lo posible no elaborar alimentos.
Lavar y desinfectar todos los utensilios en contacto con carne cruda: tablas de picar, cuchillos, cubiertos, etc. Para desinfectar utilizar una parte de lavandina por 9 de agua.
Consumir leche y jugos pasteurizados y conservados en frío.
Descongelar los alimentos en la heladera. Nunca deben quedar los alimentos más de dos horas a temperatura ambiente. Además, al colocar carne en freezer, evitar el contacto con hielo, ya que el mismo puede contaminarse y enfermarnos al utilizarlo.
No dejar enfriar los alimentos cocidos a temperatura ambiente, clocarlos en la heladera lo antes posible, No congelar alimentos una vez que hayan sido descongelados.
Lavar bien frutas y verduras antes de consumirlas.
En caso de usar piletas (lona, plástica, inflable, fibra vidrio, etc.), cuidar el agua. Colocar lavandina “común” ó “concentrada” a razón de 50 ml cada 1000 litros de agua. Esto equivale a 10 tapitas de la botella de lavandina o 5 tapas del bidón. Las lavandinas perfumadas o “aditivadas” no sirven para piletas. Colocar esta dosis a diario, y preferentemente de mañana, además cambiar el agua 5 a 10 cm día por medio. Los niños o adultos con síntomas de gastroenteritis NO deben ingresar a la pileta ya que pueden contaminar el agua y enfermar a los demás.
Es importante también que todos los manipuladores de alimentos, ya sean fábricas, restaurantes, comedores, transportistas, etc., tomen conciencia de lo grave de esta enfermedad y respeten las buenas prácticas de manufactura a los fines de cuidar la salud de los consumidores, en especial los niños.
Ante la aparición de alguno de los síntomas antes mencionados, consultar rápidamente al médico y Nunca automedicarse.
Fuente: Ministerio de Salud Ministerio de Salud – Río Negro.